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El Árbol Sonante Cantante (Singing Ringing Tree), es un instrumento de viento diseñado por los artistas visuales, Mike Tonkin y Anna Liu, en el año 2006 |
Buscar la palabra que expresa de manera más precisa una idea
es una de las claves que debemos tener en cuenta a la hora de traducir un libro.
Entre los recursos retóricos para lograr que el lector «viva» la historia,
destaca el despertar de los sentidos. No se trata de contar al lector lo que
pasa, sino de hacer con que lo experimente por sí mismo.
La imagen sonora consiste en tratar de reproducir de manera figurada los sonidos de la naturaleza, de los hombres y de las máquinas o instrumentos. El dulce trino de los pájaros o el monótono tamborileo de la
lluvia sobre un techo de zinc; el familiar silbido de una tetera o el aterrador estruendo de una avalancha;
el ensordecedor estallido de las bombas o el molesto zumbido del mosquito,
la descripción del ambiente sonoro agrega vida a la acción que se relata y
evoca recuerdos y sensaciones. Por lo común, se usar sonido para describir algo agradable y ruido para describir algo molesto o impactante.
Para reproducir el paisaje acústico con fidelidad y
verosimilitud, debemos buscar el correspondiente exacto o el que reproduzca, tanto
como sea posible, el efecto del original. Veamos, a continuación, algunos
ruidos frecuentes en la literatura, su traducción al portugués y sus
respectivas definiciones:
Abucheo
(vaia): manifestación
ruidosa de un auditorio o muchedumbre para expresar reprobación.
Alboroto (alvoroço): vocerío,
desorden, tumulto, como el que producen los niños en el recreo.
Alarido
(alarido): grito
lastimero de pena o dolor, como el que emite un herido.
Balbuceo
(balbucio): habla dificultosa
y vacilante, trastocando a veces las letras o las sílabas, como la que emiten los bebés.
Bramido
(bramido, rugido):
voz del toro, ciervo y otros animales; grito colérico o voz fuerte; ruido
grande producido por el viento o por el mar.
Bullicio
(bulício, barulho,
confusão): ruido o rumor resultante de la concurrencia de mucha gente.
Carraspeo
(pigarro): tosecilla
emitida repetidamente para aclarar la garganta.
Cascabeleo
(chocalho): sonido
producido por cascabeles, como el que producen los coches de caballos.
Chasquido
(estalo, estalido):
ruido seco y súbito, producido al partirse algo, al sacudir un látigo o al
separar la lengua bruscamente del paladar.
Chapoteo
(chape, chapinhar):
ruido producido al mover las manos o los pies en el agua o lodo, o al pisarlos.
Chirrido
(chiado, chilreio/chilrada
de pássaros): sonido agudo y desagradable, como el que produce una puerta oxidada
al abrirse.
Chisporroteo (crepitar)= sonido
emitido por un cuerpo en el fuego, que despide chispas reiteradamente, como la leña en la hoguera.
Clamor
(clamor, protesto):
grito que se profiere con vigor y esfuerzo, muchas veces por una multitud.
Crepitar
(crepitar): sonido repetido, rápido y seco, como el que produce la sal en el fuego.
Crujido
(rangido): sonido
producido por algunos cuerpos, como tela, dientes, madera, cuando se rozan o se
rompen.
Cuchicheo (cochicho): habla
en voz baja al oído, de modo que otros no se enteren.
Estallido
(estouro): ruido
fuerte producido por una cosa que se revienta de golpe, como el de un
cohete.
Estampido (estampido): ruido fuerte y seco como el producido por un disparo.
Estrépito
(estrépito): ruido
considerable, como el de una pieza de artillería.
Estruendo
(estrondo): ruido
grande, como el de un avión.
Farfulleo (algaravia): ritmo
rápido del habla con interrupciones en la fluidez, habla atropellada y confusa.
Fragor
(estridor, fragor):
ruido estruendoso, como el de los truenos.
Frufrú
(frufrulhar, fru-fru):
ruido que produce el roce de la seda o de una tela semejante.
Martilleo
(martelar): ruido
semejante al producido por los golpes de un martillo.
Ovación (ovação): manifestación
ruidosa, mediante aplausos y gritos, de un auditorio o muchedumbre en tributo a
alguien.
Rechifla (vaia): silbido
para burlarse o demostrar desaprobación.
Rechinido
(rangido, chiado):
ruido producido generalmente por el roce de dos cosas, como el que produce el roce de los
dientes.
Repiqueteo
(repicar): ruido
resultante del golpe repetido de un objeto, como el de las
campanas.
Resonar
(ressonar, ecoar): hacer
sonido por percusión, como el que emiten los tambores.
Resoplido,
bufido (resfôlego, bufo):
respiración fuerte y ruidosa.
Retumbar (retumbar): resonar
mucho, hacer gran ruido o estruendo, como el de las bombas.
Ronquido
(ronco): ruido
bronco con el resuello cuando se duerme; ruido sordo o bronco del mar o del
viento.
Ronroneo
(ronrom, ronronar):
ronquido del gato en demostración de contento.
Rumor
(rumor): voz que
corre entre el público; ruido confuso de voces.
Silbido
(assobio): ruido producido
por la agitación del aire; sonido agudo producido al soltar el aire con fuerza con
los labios fruncidos o con los dedos en la boca o con un silbato.
Siseo
(susurro, chiado): emisión
del sonido inarticulado de s o ch, por lo común para manifestar desaprobación o
para pedir silencio.
Susurro
(susurro): murmullo
o ruido suave y remiso, como el de un arroyo.
Tamborileo (tamborilar, batuque): sonido repetido que imita un tambor, como el que producen los dedos sobre la mesa.
Timbrazo (toque): alerta sonora fuerte emitida por un aparato, como un teléfono o un timbre.
Tintineo
(tilintido): sonido del tintín, como el de las llaves.
Traqueteo (estridor): ruido continuo del disparo de los cohetes.
Triquitraque (estridor): ruido como de golpes repetidos y desordenados, como el de los telares.
Tronido,
tronar (trovejar): trueno
de las nubes; estallido, estrépito, estruendo.
Ululeo,
ulular (ululo, ulular):
gritos o alaridos; sonido producido por el viento.
Zumbido (zumbido, zunido): ruido
continuado y bronco como el que se produce a veces dentro del propio oído, como el que producen ciertos insectos al volar.
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